23. nov., 2019

LE CLUB SUSHITA

Viernes intentando reservar en un Japo para sábado y, como podéis imaginar, tarea imposible; ¡todos llenos!. Así que, cuando ya lo daba todo por perdido, entro en IG y me aparece así… delante de mis ojos…por arte de magia, una publicación de sushita cafe (¿me estabais llamando?🙃) y -cual es mi sorpresa- cuando me doy cuenta de que es uno nuevo; sí la 6ª apertura del Grupo “Sushita Café”. No había oído nada de esta nueva apertura y es que lo han llevado con bastante discreción mientras lo ruedan. Pues bien, tenían sitio y allí que nos fuimos. Espectacular local con una decoración que –para los que sois de mi quinta- os va a recordar a las casas en las que vivisteis de pequeños (ya me lo contaréis). Toda la decoración es años 70 y, he de confesar, que me encantó y no lo vi nada trasnochado, ese interiorismo y ese mobiliario de esa época me encanta. Fíjate en los papeles de la pared, en las sillas, en las moquetas, en el mueble del DJ absolutamente precioso y de la época; TODO me parece logradísimo y precioso. Me atrevería a decir que, junto con el de Miguel Angel, éste es el que más me ha gustado hasta el momento (porque seguro que vendrán más…😀). Es muy acogedor en la zona del fondo donde los techos son un poco más bajos y te encuentras como en el salón de tú casa, con esa librería corrida en la pared, o sentándote en esa zona de salón 100% con butacas y sofás delante de la chimenea; esa zona es muy cálida como para tomar algo de picoteo con una bebida; para cenar de cubiertos mejor las mesas bajas. La zona central del fondo está presidida por una preciosa barra tapizada (como todas las de sushita) en los mismos tonos naranjas predominantes en todo el local ¡qué chulada!. Al llegar, la música resultaba un poco alta pero luego pasa desapercibida cuando se llena de gente; porque se llenó hasta la bandera. Habían inaugurado la noche anterior y lo del rodaje que os comento al principio, ni lo noté. Servicio súper profesional, tiempos entre platos perfectos y atención máxima. La mesa ideal vestida con los cubiertos tipo los de “Monsieur sushita” cuidados, los platos geniales también en naranjas alternando redondos y cuadrados y servilleta de tela ¡of course!. La carta (no te pierdas el vídeo al final del post) es también corporativa con la portada en naranja y ese rotulado que veías cuando pasabas por los locales de la época (cerebro, bocaccio, long play, incluso pachá) los tengo en la cabeza, ¡esas letras!; mucho detalle en todo lo que rodea al interiorismo. Carta muy extensa (algo menos que en Velázquez) con cosas que ya son un clásico en el Grupo (como los rollitos de pato o la tempura de gamba roja) y otras nuevas que es a lo que más nos lanzamos. No traen nada de aperitivo. Pedimos: la tempura de gamba roja (13.90€) que estaba tan rica como siempre; Le club Maki roll (11.90€/8 piezas), plato nuevo, elaborado con queso crema, langostino tempurizado, aguacate y salmón, muy fresco; Nigiri de salmón braseado con salsa teriyaki (2.50€/un.) que me pareció que estaba espectacular, lo mejor; Nigiri de atún toro flambeado (2.75€/un.) también rico; Nigiri de foie con frambuesa y teriyaki (2.75€/un.); Calamarcitos en tempura con su tinta (11.90€/6 piezas) que es un plato nuevo en formato Maki y que hay que pedirlo; Croquetas de carabineros (7.90€/6 piezas) que son novedad y están increíbles, con una bechamel super suave y fluída ¡riquísimas!; Arroz bibibamp (11.90), arroz coreano con solomillo y un huevo por encima que mezclas con lo demás, rico. De postre (por probar alguno) aunque ya no pudimos terminarlo pedimos la tarta de crema de yougur griego, vainilla y frutos rojos (8.90€/para 2 personas)) que es un postre super lucido por su presentación más que por su sabor, un poco flojo. Al terminar tuve la oportunidad de saludar a Carlos el encargado (al que ya conocía de “Madame”) que es un encanto y me enseñó toda la parte de abajo (sí, dispone de otra planta) donde tienen a punto de inaugurar lo que va a ser un Club, con acceso independiente (en plan bar clandestino, aunque no lo sea), donde puedes cenar en un reservado, o tomar una copa o bailar sobre un colchón de agua, o cerrarlo para una fiesta privada con todas las sugerencias que se te ocurran. En resumen: tienes que venir a conocer este nuevo proyecto, con un ambiente muy bueno de gente, en una ubicación muy apetecible ahora en Navidad sobre todo por todas las iluminaciones, con los ya clásicos y estudiados platos riquísimos de Sushita y algunas novedades más a precios más ajustados que otros japoneses y con un interiorismo que supera, por bonito, colorido y novedoso, todo lo demás. Cuenta con un aparcacoches en la puerta trasera que se encuentra en la calle Pedro Muñoz Seca y, si no, tienes el parking en la Pza. de Cibeles. Alcalá, 63.

Comentarios recientes

27.06 | 06:28

Me alegro que te haya gustado. Espero que la uses

27.06 | 06:13

Muy buena guía gastronomica!. Gracias.